La granola es una mezcla de cereales, frutos secos y semillas que, junto con algún ingredientes más, supone una buena opción para desayunar o merendar. Incluso para acompañar algunos postres.
Está llena de buenos nutrientes y fibra, además de resultar muy rica para acompañar yogur, leche, frutas, ...Y como es tan fácil de preparar en casa, no hay razón para comprarla ya preparada, porque suele tener mucho más azúcar. Sólo mezclar ingredientes y hornear un poco. Aguanta perfectamente unas semanas en un bote hermético.
Estuve mirando diversas recetas y al final hice una mezcla de varias de ellas. Podéis probar con otros frutos secos y añadir fruta deshidratada. Raquel Bernacer le añade clara de huevo para que se apelmacen más los ingredientes en algunas zonas y queden más crujientes. A mí esta combinación me ha gustado mucho.
-230 g de copos de avena
-140-150 g de frutos secos naturales o tostados sin sal (he puesto nueces y avellanas, pero podéis añadir pistachos, anacardos, almendras, ...)
-80 g de mezcla de semillas (he puesto una mezcla ya preparada con pipas de girasol, pipas de calabaza, sésamo, lino marrón y semillas de amapola)
-30-40 g de agua
-30 g de aceite de oliva (o poner la mitad de aceite de coco y la mitad de oliva)
-50 g de miel
-Una pizca de sal o escamas de sal
-Un poco de canela o vainilla
-4 cuadraditos de chocolate 85%
Precalienta el horno a 140-150º.
Mezcla los copos de avena con las semillas y los frutos secos ligeramente troceados.
Pon en un cazo el agua junto con el aceite, la miel, la sal y la canela. Calienta y remueve hasta que se haya disuelto todo bien. Puedes verter este líquido sobre los cereales y frutos secos y remover hasta que esté todo bien impregnado o poner los ingredientes secos en el cazo y dejar cocinar sin parar de remover durante unos minutos. Esta última opción es la que sugiere Susana de Webos Fritos. Yo no lo hice así pero en otra ocasión probaré.
Una vez mezclado todo, verter sobre la bandeja del horno, con papel vegetal encima. Extender muy bien y hornear una media hora o algo más, removiendo cada 10 minutos.
Sacar del horno y pasar a otra bandeja para que se enfríe. Cuando ya esté fría la granola, añadir el chocolate cortado a cuchillo. Yo no le pongo gotas de chocolate porque normalmente tienen más azúcar que chocolate. Mezclar y guardar en un bote o recipiente hermético al que no le dé la luz ni el calor.
Lista para tus desayunos o meriendas.
Que las penas no te hagan sombra, que la rabia se aparte de ti. Precioso lo nuevo de Dorian.
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