Esta es una forma muy particular de comer legumbres. El Falafel o croqueta de garbanzos procede de Oriente Medio y Oriente Próximo y tiene el sabor especiado de esa comida. Yo la he adaptado a mis gustos y a los ingredientes que tenía y el resultado ha sido bastante bueno. En lugar de utilizar garbanzos crudos puestos a remojo, he usado garbanzos cocidos de bote, que suelen estar un poco duritos.
Ingredientes (para 20-25 unidades):
-Un bote de garbanzos cocidos
-Una cebolleta
-Una zanahoria
-Un huevo
-Pan rallado
-Comino molido
-Cúrcuma
-Pimentón
-Sal y Pimienta
-Huevo, pan rallado y aceite para el empanado y fritura
Para la salsa:
-Un yogur natural
-Sal
-Pimienta
-Una pizca de comino molido
-Un chorrito de aceite de oliva vírgen extra
Primero se lavan bien los garbanzos para que se les quite el líquido en que vienen. Se trituran con un tenedor hasta formar un puré.
Se pica la cebolleta en trocitos muy pequeños y se añade al puré de garbanzos. Se ralla la zanahoria y se añade también.
Ahora se ponen las especias al gusto. Sal y pimienta. Comino molido, cúrcuma y un poquito de pimentón.
Se bate un huevo y se añade a la mezcla. Se pone un poco de pan rallado para que pueda manejarse mejor. Se reserva en la nevera un rato hasta que se asienten los sabores.
Mientras tanto podemos hacer la salsa de yogur mezclando todos los ingredientes al gusto y batiendo bien hasta que nos quede una consistencia de salsa.
Para formar las croquetas, se cogen pedazos de masa y se pasan por pan rallado, huevo batido y pan rallado. Se fríen en aceite caliente y se sacan sobre papel absorbente.
Se sirven calientes, acompañados de la salsa de yogur y una buena ensalada.
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