Hornazo de masa dulce

Esta empanada, típica de Salamanca, se come en toda la provincia durante la Pascua. En Salamanca capital se consume sobre todo el Lunes de Aguas, lunes posterior al Lunes de Pascua. 

Se trata de una masa rellena de embutido (jamón, lomo, chorizo...). Hay tantas variedades como pueblos en la provincia. El hornazo que he elaborado procede de la comarca de Alba de Tormes y tiene la peculiaridad de llevar una masa dulce aunque el relleno es salado. El contraste resulta muy rico, aunque es cuestión de gustos, claro. La receta es del blog Tartas y nubes de azúcar. Yo la he cambiado un poco.

Ingredientes:

-2 huevos

-150 ml de agua templada

-150 ml de leche entera

-150 ml de aceite de girasol

-180 gr. de azúcar

-25 gr. de levadura prensada de panadero

-800 gr. aproximadamente de harina de fuerza (puede ser un poco más o un poco menos. La masa debe quedar manejable y que no se pegue a las manos)

-Una pizca de sal gruesa

Relleno:

-Lonchas de jamón serrano no muy curado, cortadas un poco gruesas

-Filetes de lomo de cerdo fresco adobado, en crudo

Además, un huevo batido para pintar por encima el hornazo y azúcar para espolvorear.

En la mitad del agua templada se pone la pizca de sal gruesa y la levadura y se disuelve todo bien. Luego se añade el resto del agua y la leche y se mezcla.

Por otro lado, se baten los huevos con el azúcar, se añade el aceite, y luego la preparación anterior. Se va añadiendo poco a poco harina y removiendo y amasando hasta que la masa no se pegue a las manos.

La masa se tapa con un paño y se deja reposar hasta que doble su volumen. Harán falta algunas horas. 

Una vez haya leudado o fermentado, se vuelve a amasar y se divide en dos para hacer las dos tapas del hornazo. Quedará un hornazo grandecito. Pueden hacerse dos más pequeños si se quiere (o dividir las cantidades a la mitad para hacer solamente uno pequeño).

Con un rodillo se estiran las dos partes no demasiado finas. Se coloca una sobre la bandeja del horno y se rellena con el lomo y el jamón en varias capas.

Luego se coloca la tapa y se cierran bien los bordes. Se tapa con una paño y se deja fermentar otra vez, al menos una hora. 

Finalmente se pinta con huevo batido y se espolvorea bien de azúcar. Se hornea, con horno precalentado a 180º, durante una media hora, más o menos, hasta que esté bien dorado.