Todavía tenía congelados unos trozos de pierna de cordero que corté antes de preparar el asado en mayo, así que he aprovechado para cocinar esta menestra.
La verdad es que el cordero le aporta mucho sabor. Pero si se quiere prescindir de la carne, puede hacerse con soja texturizada en trozos grandes. También quedará muy buena, aunque habrá que añadir más especias y un poco de tomate concentrado y salsa de soja para compensar el sabor.
Ingredientes:
-Un trozo de pierna de cordero (puede hacerse con otras partes menos magras como los bajos)
-Una cebolla grande
-Verduras variadas al gusto (Yo he puesto judías verdes, guisantes, zanahoria, espárragos, alcachofas y cardo. Pueden ser congeladas)
-Un vasito de vino blanco
-Una cucharada de harina
-Dos hojas de laurel
-Sal y pimienta
-Aceite de oliva virgen extra
Cortamos los trozos de cordero en pedazos según nuestro gusto. Los salpimentamos y los doramos en un poco de aceite. Reservamos.
En el mismo aceite, pochamos la cebolla finamente picada, con una pizca de sal. Ponemos también las hojas de laurel y tapamos.
Cuando la cebolla esté blanda, añadimos las cucharadas de harina y removemos bien hasta quitar el sabor a crudo. Vertemos el vino blanco y removemos. Luego añadimos agua e introducimos el cordero de nuevo. Cocinamos hasta que la carne esté bien hecha.
En cuanto a las verduras, podemos cocerlas aparte en agua hierviendo, según la cocción que necesite cada una y añadirlas a la cazuela del cordero cuando ya esté la carne cocida. Así es como lo he hecho yo, añadiendo parte del agua de cocción al guiso.
Otra opción es añadirlas directamente a la cazuela para que se cocinen cuando le falte poco a la carne.
Rectificar de sal y servir caliente.
Un grupo que acabo de descubrir gracias a Spotify y me ha sorprendido gratamente. Últimamente se hacen unos vídeos preciosos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario