Tenía ganas de probar a cocinar un bizcocho en la freidora de aire. He improvisado esta receta, siguiendo una idea de "Recetas para ser feliz" y ha resultado un pastel húmedo más que un bizcocho, pero muy rico. Podría ser una avena horneada de las que se ven mucho últimamente.
Lo he preparado en un molde pequeño (15 cm) que era el que entraba en la freidora de aire. Con la masa sobrante hice un bizcocho a la taza en microondas y también quedó muy bueno.
Ingredientes:
-2 huevos
-60 ml de aceite de oliva virgen extra
-120 ml de bebida de avena o leche
-Especias para bizcocho o canela
-50 g de azúcar
-120 g de harina de avena integral
-Medio sobre de levadura
-Un buen puñado de arándanos (he utilizado congelados)
Pelamos y rallamos la manzana. Ponemos en un recipiente y añadimos los dos huevos, el aceite y el azúcar u otro endulzante. Mezclamos con unas varillas.
Ponemos las especias elegidas. Yo he utilizado una mezcla que lleva canela, cilantro, jengibre, anís estrellado, clavo y nuez moscada. Es de Todoespecias y le da un sabor muy rico a este tipo de preparaciones.
Añadimos la harina de avena y la levadura e integramos todo bien. Finalmente, ponemos los arándanos y repartimos.
En un molde engrasado y que pueda ir en la freidora de aire (todos los que puedan meterse en el horno) vertemos la mezcla.
Precalentamos 4-5 minutos la freidora a 160º. Introducimos el molde y cocinamos a esa misma temperatura unos 25 minutos. Quedará una capa crujiente por fuera y un pastel jugoso por dentro.
Puede cocinarse en microondas a máxima potencia unos 5 minutos. Aunque no quedará la capa crujiente de la freidora o del horno.
Para una merienda o desayuno casi improvisados.
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